sábado, 8 de octubre de 2011

La Nueva Lucha de Clases

Es difícil saber si estamos a las puertas de una doble recesión " Double-dip", si estamos en medio de la tormenta o esto es la Tercera Guerra Mundial sin ejércitos, sin guerra convencional pero con millones de puestos de trabajo y negocios destruidos como expone el sociólogo Vicente Verdú en su último trabajo " El Capitalismo Fueneral" (Anagrama, Barcelona, 2009). También podría ser como apunta Ignacio Ramonet en Le Monde diplomatique en su edición española de este mes de octubre que esta sea una crisis que afecta a los fundamentos de nuestro sistema económico y de valores. "En realidad, no estamos soportando una crisis, sino una haz de crisis mezcladas tan íntimamente unas con otras que no conseguimos distinguir entre causas y efectos. Porque los efectos de unas son las causas de otras, y así hasta formar un verdadero sistema . O sea, nos enfrentamos a una crisis sistémica del mundo occidental que afecta a la tecnología, la economía, la política, la democracia, la guerra, la geopolítica, el clima, el medio ambiente, los valores, la familia, la educación, la juventud, etc." Nos interesa, por tanto, mientras siga está sucesión de túneles al final de cada débil haz de luz, que establezcamos nuestras prioridades para estos tiempos de escasez. El desplome de la actividad económica nos ha traído un desfase asesino entre ingresos y gastos que ha puesto al sistema financiero y al estado del bienestar en posición de jaque reiterativo. Cómo responder al enorme desafío desempolva la vieja retórica de lucha de clases que creíamos superada con la deslocalización de buena parte de la producción industrial a Asia y la terciarización de la economía. La novedad de esta crisis 2.0 es que las bombas y las bajas se están produciendo tanto entre los trabajadores con poca especialización como entre personas de la clases medias bien instruidas y sobre los hijos de éstas que terminan sus estudios superiores y se encuentran con sueldos precarios o con un desempleo del 50%. Qué hacer se cuestionaba Lenin y vuelve a ser la gran pregunta frente a las incertidumbres. Convendría establecer lo fundamental y lo que es sólo importante para diseñar las estrategias más adecuadas y minimizar los daños repartiéndolos de manera justa. Deberíamos apretar los dientes y trabajar codo con codo como buenos patriotas para salir juntos de este desafío con el menor número de bajas posible. Está claro que no hay una receta única y que hay mucho de ideología en las distintas decisiones políticas. No es lo mismo recortar en educación, en sanidad, en dependencia y en cultura que darle un giro a la política fiscal para que los impuestos sean proporcionales al nivel de ingresos y al patrimonio de cada uno. No es lo mismo arremangarse para luchar contra el fraude, la economía sumergida y las situaciones de privilegio fiscal que disfrutan muchas de las grandes empresas que operan en nuestro país que aceptar que esta situación no tiene remedio. No es lo mismo situar la reducción del desempleo y la formación de los trabajadores para que vuelvan a ser útiles en el mercado como un objetivo prioritario que aceptar el paro como un desastre natural sin explicación ni solución. La gente debería saber, cuando celebra los recortes como la única medicina que nos ha de curar, que la atención en hospitales será cada vez peor, los tiempos de espera y sus dramáticas consecuencias de sufrimiento y dolor se alargarán y la atención primaria se deteriorará inexorablemente. El personal que jalea la situación " privilegiada" de los maestros debería darse cuenta que eliminar desdobles, refuerzos, reducir parte de la atención individualizada a los alumnos que la necesitan irá en detrimento de nuestros estudiantes y de la sociedad en general. Reducir las ayudas a la dependencia aleja la posibilidad de suavizar el calvario a los enfermos de larga duración y a sus familiares. Por último, entender la cultura como un lujo superfluo es olvidarse de la dimensión espiritual y humana de las personas, es triste que la política sea incapaz de ver en el individuo algo más que un mero productor y consumidor de servicios y mercancías sin otras necesidades que las establecidas por el mercado. Cuenta Tony Judt en "Postguerra" (Taurus, España, 2006) como, tras la Segundo Guerra Mundial, la Democracia Cristiana y la Social Democracia trabajaron juntas para edificar el andamiaje de un estado que garantizase educación, sanidad, cultura e infraestructuras y que permitiera así el desarrollo social y económico de todos, reduciendo la exclusión social. Este welfare estate, ahora en peligro, fue uno de los grandes inventos del siglo pasado. Sólo la educación universal y gratuita ha permitido que los hijos de los más humildes mejoraran su nivel cultural y social. El acceso a estudios superiores de amplias capas de la sociedad española, el derecho a una sanidad gratuita y de calidad así cómo la creación de mediadas de solidaridad social con los más desfavorecidos constituyen buena parte del legado más valioso de lo que han hecho por España las generaciones precedentes. Deberíamos ser conscientes de ello y defender esta obra intergeneracional con uñas y dientes. La desamortización de los servicios básicos y su privatización nos conducirá inexorable a un mundo más injusto, con una brecha social que dividirá a los que pueden pagar la escuela de calidad, la universidad y el médico y a los que no. Resistirnos a esta situación es la nueva lucha de clases. La batalla ha comenzado. mono3

Un tema de uno de los grupos más interesantes del año, con ese sonido que parece recuperar el pop con estilo de Roxi Music.



Este grupo ha sido todo un descubrimiento, mezclar power pop, a Elvis Costelo , el sol de California vía Beach Boys y a la Big Star, tiene estos resultados. Su segundo trabajo “as far as yesterday goes” (Grimble records, 2011) es fantástico. La lástima es que no he podido encontrar ningún vídeo de ellos

14 comentarios:

  1. Hay cosas que no se deberían recorta: sanidad, educación y servicios sociales. Ya que no es una guerra "convencional", se podría recortar en defensa por ejemplo. O en otros sitios, como instituciones ineficaces y poco representativas, que todos tenemos en mente.

    Saludos.

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  2. Gracias por Red Button, no los conocía y me gustan, mezcla total,Elvis Costello,Beatles,Smithereens.....y tiene gracia son de California!

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  3. Excelente artículo. Efectivamente, parece que los pilares de nuestro bienestar se tambalean. Desdichada coyuntura esta que nos toca vivir donde se dan cita desde la desmesurada codicia de inversores y especuladores de todo tipo hasta la poca altura de la clase política en la previsión y respuesta ante un escenario económico posible. Estaría guay ver este tiempo con cierta perspectiva histórica, debe ser de risa. Dicho esto, quisiera aportar algunos ejemplos cotidianos de nuestras propias miserias (¿morales?) como elemento introductorio en vistas a un acto de contrición coral. Vayamos por partes.

    Sanidad: no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos. Digo esto porque, en general nos quejamos bastante de un sistema de salud que está muy bien y no nos sale muy caro. Sí, nos quejamos de tener que esperar en el ambulatorio o en urgencias. Nos quejamos de que nos atienda un médico cubano o esloveno por el mero hecho de ser extranjero. Además, en general, no nos cuidamos. Estamos muy acostumbrados a que cuiden de nosotros. Fumamos como chimeneas, bebemos como cosacos, nuestros niños están gordos, follamos sin condón,.... Se que sonará un tanto demagógico, lo acepto, pero si supiéramos lo que cuesta una intervención quirúrgica cualquiera en una clínica privada igual valoraríamos más nuestra sanidad pública. Y nos cuidaríamos más. Del mismo modo que cuando sabemos que podemos perder el carné o tenemos que pagar una multa del copón corremos menos o conducimos mejor. Cuando la cosa empeore de verdad en nuestro sistema público de salud igual pensamos dos veces a quien votamos.

    Educación: Nuestro sistema educativo está de puta madre. La LOE, como en su día la LOGSE, son leyes muy interesantes, ambiciosas, progres. Ahora bien, el maestro/profesor debe interpretar bien el espíritu de la ley. Nuestros colegios e institutos, por no decir de las Universidades, están plagados de docentes muy indecentes. Es verdad, no es baladí; hay gente a la que no le gusta educar, ser maestro o profesor. No todo el personal está a la altura del cargo. Si cierta gente fuera únicamente responsable de hacer lo que le toca hacer en lugar de escaquearse o dar el 50% de lo que le corresponde no habría ningún motivo para pensar que queda mucho por hacer en nuestro sistema educativo. Entre el profesorado hay mucho capullo que vive de puta madre (y se queja).

    Fraude fiscal: si mi amigo X me cuenta que su colega Ç le ha arreglado la Declaración para pagar un 40% menos al fisco no me cago en su puta madre por ser un defraudador, le pido el teléfono de Ç y le pago una caña en el bar Q. Todos, en mayor o menor medida tratamos de defraudar en este país. Es una cuestión cultural muy arraigada. Por lo tanto, evolucionemos: después de cargarnos los toros, contribuyamos todos al saco común. Ricos y menos ricos, proporcionalmente.

    Trabajo: el tío que ganaba 2000 euracos al mes poniendo tuberías en la construcción de viviendas hace unos años, sí, el mismo que se ponía de farlopa hasta el culo los viernes tarde y se compró un carraco y pidió un préstamo al banco para una hipoteca con su chica, comercial en una fábrica de muebles, ¿pensaba que lo de las tuberías duraría toda la vida? ¿Por qué no se hizo de verdad fontanero?, ¿qué le impidió ahorrar dinero y vivir de alquiler? Ahora no tiene curro, ni casa, ni novia, ni farlopa. Y para más inri, no tiene ni plaza en la escuela de adultos para sacarse el graduado. Es una putada que se te vaya la pinza. Pero en la cola del paro este cabrón se queja de Zapatero.

    Perdonar la incongruencia de alguna de mis afirmaciones; me ha salido así. Lo que pretendo decir es que efectivamente estamos ante un asunto sistémico, que afecta a toda la sociedad, nadie es culpable pero lo somos todos. Yo, sinceramente, creo que la crisis de valores precede a la crisis económica actual. Puede ser, de hecho, una de sus causas. Puede ser que hayamos perdido nuestra condición de clase confundidos en las miserias de nuestro estado de bienestar. Menos mal que queda buena gente.

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  4. Los ejemplos son ejemplos , muy representativos, algunos incluso estereotipos pero no nos olvidemos de los peces gordos que se lo han llevado crudo.Además, si aceptamos que todos somos responsables, cosas bastante discutible, lo que si es cierto es que algunos son más responsables que otros. De todas formas es muy instructivo el paisaje que describes anónimo porque parece que hayas visto la misma realidad que yo
    ¿ Nadie más se había dado cuenta?

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  5. Creo que al primer anónimo se le ha ido un poco “la pinza”. Pero dice alguna cosa bastante cierta, como eso de que hemos perdido nuestra condición de clase. Qizás nos creímos nuevos ricos antes de tiempo. Ahora bien, no todos somos responsables. Hay buenos maestros y hay gente que sabe administrar sus recursos, no sólo económicos. Y respecto al futuro inmediato, bueno, también los pesimistas pueden equivocarse.

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  6. He leído tu entrada y venía dispuesta a comentar, pero resulta que como soy cotilla por naturaleza me intereso por las cosas que piensan los demás y ¡ah! ¡sorpresa! Resulta que las campañas de descrédito contra los profesores han hecho mella. Ahora ya somos un 50% los que nos tocamos los mismos. Así es como la gente después vota a quien vota, la tele que hace mucho daño.
    P.D: Yo hoy me he metido 7 horas de clase, dos de ellas con 34 alumnos (menos mal que ha venido alguien a mí rescate y he podido ir a fotocopiar:-), me gustaría a ver a esos que tanto saben, bregar en estas pequeñas batallas diarias.
    El futuro de la enseñanza pasa por más recortes, volveremos a tener tres niños por pupitre de dos (por cierto en Teulada ya los tienen en 4º de la ESO, en Consellería han pensado que eso de la "ratio" les suena a chino, donde hace unos años sólo cabían 20 alumnos ahora caben el doble, es mágico). Es cierto somos unos mantas.
    Un saludo.

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  7. Anonimo el problema es que nos falta una visión global de la realidad en la que trabajáis, de todo lo que dais y de lo que podemos perder. Animo. NO desanimaros que muchas sabemos lo importante que son los maestros y las maestras que se lo currran ( que son casi todos)

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  8. Soy el anónimo varias veces citado. Ya advertí que lo escrito fue un tanto espontáneo y, por lo tanto, no del todo meditado. No obstante, lo que yo trataba de compartir con los asiduos de este magnífico blog es que resulta obvio que los recortes van a hacer mella en nuestros servicios públicos, pero también nosotros, como usuarios y profesionales de los mismos no siempre contribuimos a la buena salud de estos. Exageré diciendo que el 50% del profesorado se escaquea, y pido disculpas por quién se halla sentido aludido/a. Pero hay mucha gente, en particular gente joven, sin ninguna vocación de servicio público, es más, con muy poca sensibilidad hacia lo que significa tratar con niños y niñas con diferentes ambientes familiares, económicos, afectivos, .... Te propongo una encuesta en tu centro educativo. Pregunta a tus compañeros/as quienes piensan viajar el día 22 a Madrid para protestar por los recortes. Me apuesto contigo un bocadillo de calamares con mayonesa a que no va la mitad. No te lo tomes a mal, pero protestar también es una cuestión de clase. Eso que hemos perdido.

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  9. Hola señor anónimo soy la señora anonima.
    Te propongo otra cosa, ¿quieres pasar un día dando clases? Podrás comprobar lo que es motivación y servicio a la ciudadanía. En mi cole somos unos 25 profesores más o menos, ¿quieres venir a ver si alguno se está escaqueando?
    Por regla general, esta profesión es vocacional, porque ya te digo que de lo contrario no aguantas niños desmotivados, familias que no aparecen (porque ya han dejado al niño en el garaje) o todo lo contrario madres/padres que saben mucho de pedagogía porque ya lo han hablado en el bar o en la entrada del colegio. Pero por contra tenemos familias estupendas, niños maravillosos, empleo mejor pagado del mundo, vacaciones interminables.
    Ahora en serio, ADORO SER PROFESORA, no podría ser otra cosa y creo que la mayoría de mis compañeros, el 99% son igual. Un saludo.

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  10. Hola señora anónima soy el señor anónimo varias veces citado. ¿Usted quiere hacerme creer que el 99% del profesorado en la actualidad está donde trabaja por vocación? Con todos los respetos, señora anónima, me parto de risa ante una afirmación de ese calado. Lo de la “vocación” pertenece al pasado. Hoy, una amplia mayoría de quien se dedica a la enseñanza lo hace porque es una salida profesional como cualquier otra. Y por favor, no me entienda usted mal señora anónima, gracias a gente como usted las cosas funcionan. Es lo que pretendo apuntar. Defender a todo el profesorado por igual como usted hace se aproxima a una práctica muy habitual entre la función pública llamada corporativismo. O es que su centro de trabajo es la hostia respecto al personal. Soy maestro y en mi cole no sólo hay gente que se escaquea sino que trata de abortar propuestas pedagógicas comprometidas, encaminadas a “compensar” los déficits de muchos de nuestros alumnos/as. Señora anónima, hay mucho jiji-jaja que no se entera de que va el cuento. Mis respetos, y tenga en cuenta lo del bocadillo. Ya me dirá.

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  11. Bueno señor anónimo, el bocadillo lo tiene ganado, una desilusión, pero es así, premio para el caballero :-)
    Por otro lado, debí expresarme con más claridad, no quiero decir que mis compañeros estén todos por vocación (eso no lo encantramos ya ni en los minstros de la iglesia), lo que quise decir es que la inmensa mayoría trabaja bien o muy bien y que además normalmente te dejas el alma para poder subir a esos chavales.
    Le veo a usted, no obstante, bastante desilusionado con los compañeros que le han tocado, siento mucho que su suerte no haya sido tan buena como la mía.

    Un saludo.

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  12. Lo estoy pasando pipa con el sr. y la sra. anónimos. Sin embargo, veo al sr. anónimo un tanto excitado de más, un poco pasado de revoluciones. Relájese usted, sr. anónimo. Haga bien su trabajo que sus niños y niñas se lo agradecerán. En los momentos chungos ... piense que el universo se expande o, mejor aún, mire desde cierta distancia la cara de la gente a la que quiere, fíjese, qué bonicos/as son. Tómese una caña, sr. anónimo, escuche un buen disco y haga el amor. No se enfade que rendirá menos y, no lo dude, le necesitamos. Porque sr. anónimo, usted es uno de los nuestros.

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  13. Ja,ja!
    Con tanto anónimo me lío!Os invito a que os hagais visibles, yo soy Sofía, aquí Modi porque es el alias de uno de mis pintores favoritos.

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  14. Paco, me has alegrado el día!

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